Todavía nos queda mucho por descubrir en nuestra aventura por el continente asiático. Hoy desde el hotel de lujo en Alicante Asia Gardens Hotel & Thai Spa viajamos en el tiempo hasta Japón para conocer el origen de los abanicos nipones.
El abanico tradicional japonés es mucho más que una pieza de arte. A lo largo de la historia, este objeto ha cobrado gran importancia en la vida diaria de los nipones, así como en las ceremonias imperiales y religiosas.
En el pasado, los abanicos japoneses constituían la mayor exportación del país. En la actualidad, además de su función principal de refrescar, son utilizados en numerosas prácticas culturales niponas como la danza Kagura o el teatro Noh.
Es difícil precisar su origen, pero podemos decir que su historia comienza en China, desde donde llegarían a Japón a través de Corea. Los primeros modelos de abanicos que se comercializaron en el país nipón fueron los abanicos fijos denominados uchiwa.
No obstante, de acuerdo a una famosa leyenda popular, se considera que el abanico plegable conocido como ôgi, se inventó en Japón. Fue durante el periodo Heian (794-1192) cuando el abanico de corte hiôgi alcanzó un gran esplendor. Se creaban atando tiras de hinoki (ciprés japonés) con hilos. El número de tiras de madera diferenciaba el rango del portador. Actualmente, también el diseño y los materiales empleados para crear el abanico, varían en función de que la persona a la que va dirigido sea más o menos importante.
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