Hoy desde el hotel de lujo Asia Gardens Hotel & Thai Spa hemos viajado hasta Japón para conocer uno de los símbolos del país: el Monte Fuji.

El Monte Fuji es un volcán situado en la isla de Honshu, entre las prefecturas de Shizuoka y Yamanashi. Con 3.776 metros de altura, es el pico más alto de Japón. Está considerado el símbolo nacional por excelencia.

En el año 2013 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO por su significado cultural. El monte ha sido inspiración de poetas y artistas a lo largo de la historia.

El Monte Fuji es lo más fotografiado del país. En un día despejado es visible desde Tokio. Se puede escalar hasta la cima, entre 6 y 8 horas, algo que los japoneses consideran que se debe hacer antes de morir. Durante las vacaciones de verano, cuando la montaña no está cubierta de nieve, los japoneses aprovechan para hacerlo. Es objeto de peregrinación desde hace siglos.

Durante la semana Obon, entre el 12 y el 20 de agosto aproximadamente, miles de personas realizan su escalada hacia la cima. Esta festividad conmemora a los antepasados ya que se cree que durante estas fechas sus espíritus regresan para visitar a sus familiares. Todas las cabañas del Fuji se decoran con grandes lámparas y farolillos que indican el camino a seguir a sus antepasados.

El Monte Fuji ha sido siempre un lugar sagrado de culto a los kamis o dioses de la naturaleza. Ha sido retratado durante todas las estaciones en numerosas expresiones artísticas. La representación mitológica simboliza al Fuji siempre acompañado de la diosa Sengen-Sama.

Existen numerosas leyendas y curiosidades en torno al Monte Fuji. La nieve localizada en la cima adquiere diferentes formas en función de la estación del año y el grado de deshielo. Según los habitantes de la zona, la nieve de la ladera norte muestra, entre los meses de invierno, la forma de un fénix de grandes dimensiones.

Además, la nieve y las nubes formadas encima del volcán servían para predecir el tiempo y acordar las fechas de la cosecha. Asimismo, los japoneses consideraban que se podía predecir la fortuna observando las formas que la nieve hace en el Monte Fuji en función de la estación.

En el resort de 5 estrellas en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa también tenemos nuestros rincones asiáticos sagrados. Te invitamos a que conozcas nuestra canoa de madera. ¡Visita Asia sin moverte de España!

En el resort de 5 estrellas en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa seguimos viajando por Asia para conocer los entresijos de sus tradiciones y cultura. Hoy nos trasladamos a China para hablaros de una de sus comidas más populares: el Dim Sum.

El Dim Sum es un tipo de comida asiática típica del sur de China, de las ciudades de Hong Kong, Macau y Guangzhou. El término significa “tocar el corazón” o “bocado”.

Está vinculado con la antigua tradición del yum cha, la prueba del té. Nació en el siglo XIX como acompañamiento del té, para que los granjeros orientales y los viajeros de la antigua ruta de la seda que visitaban las casas del té tras largas jornadas de trabajo pudieran comer algo sólido al mismo tiempo que disfrutaban de su bebida.

El Dim Sum se caracteriza por ser una comida tipo snack que se toma para satisfacer el apetito a media mañana y en las primeras horas de la tarde. No obstante, su consumo se ha extendido a la hora de la comida e incluso la cena. Se puede considerar el equivalente chino de las tapas españolas.

Está compuesto por una serie de bollos fritos o cocinados al vapor, hechos con una masa de harina de trigo o de arroz y rellenos de carne, fruta, verdura, marisco o pescado. Es por esto que su sabor es muy variado, ya que pueden ser dulces, agridulces, salados o picantes. La forma tradicional de cocinarlo es al vapor dentro de recipientes hechos de bambú.

En un restaurante de comida Dim Sum la comida debe ir siempre acompañada de té: té verde, té de jazmín, té de crisantemo, té negro, o el famoso té chino chino oolong.

Si eres un amante de la comida asiática, te recomendamos que vengas al hotel de lujo Asia Gardens Hotel & Thai Spa  y disfrutes de la fusión de la más selecta cocina oriental de nuestro restaurante Koh Samui. Además, en Asia Gardens, recibimos a todos nuestros huéspedes con un té de bienvenida. ¡Te esperamos!

Como ya sabéis, nuestro hotel de lujo Asia Gardens Hotel & Thai Spa tiene una relación muy especial con el continente asiático: cada uno de nuestros rincones te traslada a un lugar diferente de Asia.

Hoy hemos querido llevaros a Tailandia, concretamente a Kanchanaburi, para conocer los tesoros que esconde esta región: el Puente de Kanchanaburi y las magníficas Cascadas de Erawan.

El puente de Kanchanaburi, situado sobre el río Kwai, es la principal atracción turística de la ciudad. Kanchanaburi se encuentra en la región del mismo nombre, en el centro de Tailandia, a 130 km de Bangkok.

Su nacimiento se debe a una triste historia. Ya que su construcción se produjo durante la II Guerra Mundial, con fines bélicos. Esta obra arquitectónica se dio a conocer mundialmente gracias a la novela del francés Pierre Bouelle “El Puente sobre el río Kwai”, publicada en 1952, y con la película homónima de David Lean de 1957, ganadora de 7 Oscar.

A diferencia de lo que afirma la novela de Pierre Bouelle, el puente cruzaba en realidad el río Mae Klong. Sin embargo, debido a la fama de la película que convirtió la construcción en un importante punto turístico, las autoridades locales decidieron rebautizar en 1960 el tramo inicial del Mae Klong como Khwae Yai.

Originalmente, se construyeron dos puentes en la zona: uno de madera y otro de acero. Ambos fueron destruidos durante la guerra y reconstruidos, pero el de madera no sobrevivió en el tiempo; permaneciendo solamente el que conocemos hoy como el Puente de Kanchanaburi.

El Puente de Kanchanaburi esconde algo mágico, y los turistas que lo visitan afirman que tras pisarlo consiguen teletransportarse a los tiempos en que se creó. Se puede cruzar tanto andando como en tren. En la actualidad está rodeado de restaurantes y tiendas.

Otra de las principales atracciones turísticas de Kanchanaburi, situadas a 65 km de la ciudad, son las Cascadas de Erawan. Son las más famosas del país y para muchos también las más hermosas. Están situadas en el Parque Nacional de Erawan, pero de ellas ya os hablaremos en otro post… .

En Asia Gardens Hotel & Thai Spa podrás pasear y cruzar varios pequeños puentes que conectan los jardines y lagos del hotel. Quizás un día te recuerden experiencias maravillosas de tu estancia… ¡Te esperamos!

En el hotel de lujo en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa seguimos viajando por Asia para conocer las tradiciones de su cultura. Hoy nos trasladamos a China para hablaros de una de las disciplinas más practicadas en el mundo: el Tai Chi.

El Tai Chi o Tai Chi Chuan es un arte marcial originario del Imperio Chino. Su práctica está relacionada con la consecución de un mayor equilibrio psíquico y físico. Combina ejercicios corporales respiratorios y mentales permitiendo un estado de relajación máxima y concentración mental.

Forma parte de la Filosofía de la Naturaleza China. Está vinculado directamente con el Yin y el Yang y el Chi o Qi. Sus ejercicios, basados en la medicina tradicional china, actúan como un masaje muy beneficioso para el sistema muscular, la estructura ósea y los órganos internos.

En lo que respecta al origen del Tai Chi, existe una leyenda muy popular que se lo atribuye al monje taoísta Zhang San Feng en el siglo XIII. Según la misma, Zhang San Feng se inspiró en una pelea entre una grulla y una serpiente para su invención, principalmente, en la manera en que la serpiente esquivaba a la grulla.

Las cinco escuelas principales o estilos del Tai Chi son Chen, Wu, Hao, Sun y Yang. Este último, desarrollado en el siglo XIX por Yang Luchan, reconocido internacionalmente como padre de este estilo, es el más conocido de todas las formas de Tai Chi que se practican en la actualidad. Tiene su origen en otro estilo más antiguo, el Mien Chuan, y se caracteriza por movimientos suaves que aumentan el fluido de la energía vital y permiten la coordinación y concentración de la mente. Yang Chen-Fu está considerado el gran difusor contemporáneo de esta disciplina.

Durante la ejecución del Tai Chi, los movimientos del cuerpo son coordinados y perfectos. Las manos, ojos, miembros y cuerpo se mueven como un todo, usando la cintura como eje y las piernas como base. Para poder practicarlo, se requiere entrenamiento mental, respiratorio y físico.

En el resort de 5 estrellas en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa ponemos a disposición de nuestros huéspedes clases de Tai Chi con entrenadores especializados. Ven a vernos y disfruta de unos días de relax en el corazón del lujo asiático.

Hoy desde el hotel de lujo en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa nos trasladamos a Japón para hablar de una de las celebraciones más importantes del país: el festival Omizu-tori.

El festival Omizu-tori es un ritual budista que se celebra durante las dos primeras semanas de marzo en el templo Todaiji de Nara. Todaiji alberga el buda de mayor tamaño de Japón, Daibutsu, y es además el templo de mayor tamaño del país. Es uno de los festivales más antiguos de Japón, sus orígenes se remontan al siglo VIII, y actualmente reúne a peregrinos de todo el país.

El día culmen del Omizu-tori es el 12 de marzo, día en que se produce “la ceremonia de toma del agua”. Se celebra la última noche del periodo conocido como Shuni-e y tiene lugar en el Nigatsudo, una de las edificaciones complementarias pertenecientes al templo de Todaiji. Los monjes suben y bajan las escaleras del Nigatsudo iluminados con una antorcha para extraer agua de uno de los pozos del monasterio.

Según la leyenda, el pozo permanece seco durante el resto del año, por lo que el agua que emerge durante el Omizu-tori tiene propiedades curativas. Este agua se ofrece a la gran estatua de Buda que se honra en el monasterio, y a los fieles que presencian el rito. Es por esta razón que el ritual, y todos los eventos que lo acompañan, recibe el nombre de Omizu-tori.

Los días previos a la ceremonia de toma del agua, durante las dos semanas de celebración, cada anochecer se realiza una purificación con fuego. El Otaimatsu, durante el que se encienden grandes antorchas en el balcón del salón del Nigatsudo, está considerando el evento más espectacular del Omizu-tori. Los portadores de las antorchas, de entre seis y ocho metros de alto, suben uno a uno corriendo al balcón. El fuego simboliza la eliminación de cualquier influencia maligna presente en los alrededores del templo, o en el interior del espíritu de los asistentes.

El ritual finaliza con la ceremonia Dattan en el Nigatsudo, con el sonido de campanas y cuernos y el encendido de antorchas en el salón. Dura aproximadamente una hora.

Si te gustan los festivales y las celebraciones, te recomendamos que visites el resort de 5 estrellas en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa. Sentirás la tradición y la cultura asiática desde el primer momento.

Hoy desde el hotel de 5 estrellas en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa viajamos hasta Vietnam, para hablar sobre uno de los símbolos más característicos del país: el Nón Lá.

El Nón Lá, conocido como sombrero cónico en castellano, o sombrero vietnamita, forma junto al ao-dai, el traje vietnamita, uno de los elementos más representativos de Vietnam. Lleva más de 3.000 años adornando y protegiendo las cabezas de los campesinos vietnamitas.

Nace de la necesidad de protegerse ante las adversidades climáticas de un país tropical como Vietnam, caracterizado por disfrutar solamente de dos estaciones en todo el año: la estación seca y la de lluvias. Por lo que este sombrero era la solución para resguardarse tanto de las lluvias torrenciales como del sol. Esta protección permitía a su portador mantener su tez pálida, canon de belleza del continente y principalmente del país.

El Nón Lá se caracteriza por cubrir la mayor parte del rostro. Se confecciona con bambú, paja o corteza fina de árbol, unidos por hilo y se macera en azufre, mineral que le da el color blanco perlado que lo caracteriza.

El Nón Lá se utiliza principalmente en el campo, pero también es común verlo en las grandes ciudades como Hanoi o Saigon, principalmente portado por gente de avanzada edad. Aunque es originario de Vietnam, también se usa en otros países asiáticos como China, Japón, Corea, Indonesia y Filipinas.

Otro de los usos del Nón Lá es el de servir de recipiente para diferentes fines como recoger los frutos de la cosecha o el agua de la lluvia.

Mucha gente desconoce que el Nón Lá tiene dos variantes: un modelo para mujer y otro masculino. El sombrero de mujer es el tradicional, totalmente cónico, mientras que el de los hombres es más pequeño que su homólogo femenino y abombado en la punta.

En lo que respecta a la alta costura en los sombreros vietnamitas, su precio varía en función de los materiales con los que han sido elaborados. La gran diferencia principal entre un Nón Lá de mayor calidad y otro es la cinta de seda que le rodea para sujetarlo.

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En el resort de lujo en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa seguimos viajando por Asia para conocer los secretos de su cultura. Hoy nos trasladamos a Irán para hablaros de uno de sus principales destinos turísticos: las ruinas de Persépolis.

Persépolis , cuyo nombre significa la “Ciudad de Persia”, fue la capital del Imperio persa durante la época aqueménida. Fundada en el año 512 a.C. por Darío I, fue una de las ciudades más prominentes de su periodo y del mundo antiguo; hasta que en el año 330 a.C. Alejandro Magno conquistó el Imperio persa reduciéndola a escombros.

Según historiadores, destruyendo la ciudad más legendaria del Imperio persa, Alejandro Magno anunciaba el final del dominio además de vengar el saqueo de Atenas y su Acrópolis.

Lo que ahora son la ruinas de Persépolis, fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1979. Formaban parte del imperio más extenso hasta la época. En sus ruinas se desenterraron treinta mil tablillas con caracteres cuneiformes que testimonian los orígenes de la escritura.

Persépolis era una ciudad plagada de templos y edificios políticos; en su mayoría custodiados por los famosos toros alados. La arquitectura persa aqueménida está marcada por la influencia griega, en los pórticos de sus palacios; el estilo jónico, en sus columnas; y la influencia mesopotámica, en sus toros alados.

El aspecto más llamativo de la arquitectura de las ruinas de Persépolis son los paneles en bajorrelieve, con personajes representados siempre de perfil, que simbolizan desfiles imperiales y combates entre el rey y un animal fantástico con cuerpo de toro, cuernos, alas, cuello de cuervo, patas de león y cola de alacrán.

La Puerta de Todas las Naciones, a la entrada de la ciudad antigua, es uno de los lugares más simbólicos del país

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Hoy desde el hotel de 5 estrellas en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa nos trasladamos a Japón para hablar de un elemento tradicional muy famoso para la cultura nipona: el tatami.

El tatami japonés es una especie de colchón fino que se utiliza para cubrir los pisos de las casas niponas. Tradicionalmente se confeccionaba con tejido de paja de arroz, pero en la actualidad también se elaboran con poliestireno expandido.

Su origen se remonta a los inicios del Periodo Heian (794-1191), época en la que los japoneses comenzaban a alejarse de la influencia china para crear su propia cultura. Los tatamis eran un símbolo de estatus del que sólo disfrutaban las familias aristócratas y adineradas de Japón; el resto de japoneses dormían sobre un suelo de madera. Hasta finales del siglo XVI que se popularizan en todo el país. En la actualidad es común encontrar pisos de tatami en cualquier negocio o casa de influencia oriental. Su uso, cubrir una superficie, es similar al de las alfombras.

Los tatamis se asocian con tradiciones niponas como la ceremonia del té. Todas las casas japonesas tienen al menos un cuarto con tatami para realizar dicha ceremonia, acoger a los invitados o relajarse.

Las esteras de tatami siempre presentan el mismo tamaño y forma. Proporcionan el modelo del que proceden el resto de simetrías de la arquitectura tradicional japonesa. El tamaño de una habitación lo marca el número de tatamis que podría contener.

Hay diversas reglas para definir el número y colocación de los tatamis como que nunca deben situarse en cuadrícula ni coincidir en ningún punto tres o cuatro esquinas de las esteras. Existe la creencia de que si no se ubican bien atraen la mala fortuna.

Los tatamis tradicionales se adornan con cintas de seda de color verde o violeta y con brocados de oro. El precio de un tatami depende de sus cintas y de la cantidad de materiales utilizados en su confección.

Sobre los tatamis no se utilizan sillas. Para sentarse los japoneses usan unos cojines denominados zabuton.

Actualmente, podemos encontrar tatamis en Occidente principalmente en las escuelas donde se practican artes marciales, Feng Shui, yoga y otras disciplinas de relajación física y mental.

En el hotel de lujo Asia Gardens Hotel & Thai Spa disponemos de tatamis en nuestra zona de relajación. ¡Ven relajarte a nuestro paraíso asiático en el Mediterráneo!

Hoy desde el hotel de lujo en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa viajamos hasta China, concretamente a Hong Kong, para conocer una de las fiestas tradicionales más famosas que celebra hoy el país: el Festival de los Faroles de Primavera.

El Festival de los Faroles, también conocido como fiesta de las Luces o Yuen Siu, marca el final de las celebraciones del Año Nuevo Chino, considerada la festividad más importante del país, y la vuelta a la vida cotidiana tras dos semanas de celebraciones y comidas familiares. Se celebra quince días después del Chunjie, coincidiendo con la primera luna llena del año. Dicha noche miles de lámparas rojas cuelgan de las casas y negocios, preparando las calles para los desfiles y espectáculos que ponen fin a las celebraciones.

Una de las leyendas que hay respecto al origen de esta celebración, cuenta que tiempo atrás un hombre cazó un ave sagrada del Dios Celestial, y éste como castigo decidió quemar todas las casas del pueblo el día 15 de enero. La hija del Dios Celestial, que tenía buena relación con los humanos, les enseñó a encender fuegos artificiales para engañar a su padre y hacerle creer que el pueblo estaba ardiendo. Naciendo así lo que actualmente conocemos como Festival de los Faroles.

Los faroles son una parte fundamental de la fiesta. La gente escribe acertijos en un trozo de papel y los introduce en ellos, con el fin de que quien lo reciba consiga descifrarlo para obsequiarle con un regalo. Se confeccionan con seda, papel e incluso cristal. El más común es el farol de globo rojo pero en la actualidad existen numerosas variedades de diferentes tamaños y colores como lámparas cuadradas o en forma de flor de loto, dragones y mariposas.

El Festival de los Faroles incluye desfiles, música, tambores, payasos, acróbatas y en especial, las famosa Danza del Dragón y los fuegos artificiales.

La comida es un aspecto primordial dentro de la cultura china. Durante el Festival de los Faroles los asistentes comen el famoso tangyuan, unas bolas de harina de arroz rellenas de dulce o de carne. Su forma redonda simboliza la unión familiar.

Si te gustaría celebrar el Festival de los Faroles de Primavera, puedes confeccionar tus propias linternas de papel o visitar nuestro hotel de 5 estrellas en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa y disfrutar de Asia en el Mediterráneo.

En el hotel de 5 estrellas en España Asia Gardens Hotel & Thai Spa seguimos viajando por Asia para conocer los entresijos de su cultura. Hoy nos trasladamos a China, concretamente al Tíbet, para hablaros sobre uno de sus monumentos más importantes: el Palacio de Potala.

El Palacio de Potala, también llamado segunda montaña Putuo, es la máxima expresión de la arquitectura tibetana. Constituye la residencia del Dalái Lama. Construido sobre la pendiente de la Montaña Roja en el centro de Lhasa, capital de Tíbet, a 3.700 metros sobre el nivel del mar, está considerado como la mayor construcción de un palacio o fortaleza de la antigüedad que se conserva en la actualidad.

Fue construido en el siglo VII por orden del rey tibetano Sontsan Gampo. Solicitó construirlo para la princesa Wen Cheng de la dinastía Tang quien más adelante se convertiría en su esposa. Siglos más tarde, tras ser destruido por las guerras, fue reconstruido por el quinto Dalái Lama Lozang Gyatso en el año 1648. El Palacio de Potala sirvió como residencia al Dalai hasta el año 1950 cuando el XIV y actual Dalai se exilió a la India tras la invasión china.

Todas las piedras empleadas en su construcción, ya que la rueda no había sido todavía introducida, tuvieron que ser llevadas por burros o a las espaldas de los más de 7.000 trabajadores.

El Palacio de Potala ocupa más de 410.000 metros cuadrados y posee una altura de 115 metros repartidos en 13 pisos. Abarca el Palacio Blanco o Portang Karpo, en la parte oriental, que era empleado como dormitorio y sala de estudio por el Dalái Lama; el Palacio Rojo o Potrang Marpo, en la parte central, destinado a la lectura de sutras, y un salón donde se conservaban los estupas o monumentos funerarios con los restos mortales de los Dalái Lamas de diferentes periodos. Delante del Palacio Rojo hay un muro blanco donde se despliega el gran retrato de Buda los días festivos. Al oeste están situados los dormitorios de color blanco que acogían a los bonzos de confianza del Dalái.

Concebido como un lugar sagrado por los budistas tibetanos, miles de peregrinos y turistas lo visitan cada año. La visita se inicia al pie de la colina hasta llegar a la Puerta del Este, donde se encuentran las efigies de los cuatro dioses guardianes.

Los actuales arquitectos tibetanos no conciben el Palacio de Potala como una construcción obra del hombre, sino de la propia naturaleza. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1994.

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